TRENZA es una tecnología óptica patentada por LIMBAK capaz de reducir el tamaño de los visores de realidad virtual hasta el de unas gafas de sol, sin sacrificar ni el campo angular ni la resolución de la experiencia, que son claves para percibir la sensación de inmersión y calidad de imagen, respectivamente.
Los visores de realidad virtual se basan en la proyección en el ojo humano de los contenidos de un pequeño display, mediante un sistema óptico diseñado para que las imágenes se perciban en tres dimensiones (visión estereoscópica, usando un display-sistema óptico por cada ojo) y bajo un gran campo angular (sensación de inmersión).
El visor de realidad virtual TRENZA utiliza una tecnología de array de mini-lentes (que funcionan de forma similar a como lo hacen los ojos compuestos de los insectos, es decir, segmentando la imagen free-form, procesándola en paralelo y combinándola nuevamente) y entrelazado de pixels en los displays.
Con la colaboración de Pro-Lite, se ha conseguido demostrar, con una prueba de concepto, el potencial de esta técnica de entrelazado, en cuanto a reducción de tamaños del visor (solo 20mm de grosor, frente a los 60mm del estado del arte) sin perder la resolución aparente de la escena VR (17 pixels por grado).